El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha suspendido finalmente la reunión que pensaba mantener en las próximas semanas con su homólogo ruso, Vladimir Putin, en la ciudad de Budapest, Hungría, con el objetivo de ponerle fin a la guerra de Ucrania. Así lo ha confirmado este martes la Casa Blanca, quien ha asegurado que la reunión no tendrá lugar en un «futuro inmediato» a pesar de que el mandatario estadounidense había adelantando la semana pasada que la cita ocurriría «muy pronto».
«El secretario Rubio y el ministro de Asuntos Exteriores (Serguéi) Lavrov mantuvieron una productiva conversación telefónica. No es necesaria una reunión presencial adicional entre el secretario y el ministro y no hay planes para que el presidente Trump se reúna con el presidente Putin en el futuro inmediato», ha declarado un funcionario de la Administración estadounidense en un comunicado.
El encuentro, para el que todavía no se había anunciado fecha todavía, ha sido así finalmente pospuesto tras una conversación de los dos jefes de la diplomacia de Estados Unidos y Rusia en la que supuestamente habían abordado los preparativos de la cumbre. Trump, de hecho, había insistido en los últimos días que su intención era verse con su homólogo ruso en las próximas dos semanas en Hungría.
De hecho, fue el propio Trump el que había anunciado el encuentro -pactado en una llamada telefónica entre ambos mandatarios. Lo hizo, además, horas antes de recibir al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, el pasado viernes en la Casa Blanca. En esa conversación, Trump y Putin pactaron así llevar a cabo un segundo encuentro este año en persona, después de que ya se reunieran el 15 de agosto en Alaska. «Nos reuniremos en un lugar acordado, Budapest, Hungría, para ver si podemos poner fin a esta ‘infame’ guerra entre Rusia y Ucrania», indicó el presidente.
Las autoridades rusas, por su parte, también habían hablado abiertamente de esta cita. El portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov, había llegado a asegurar este lunes que los preparativos para la cumbre que se iba a realizar en la capital húngara apenas comenzaban. Este martes, en la misma línea, ha declarado sobre Budapest que «no se puede posponer algo que no se ha acordado».
«La clave no es el lugar ni el momento»
«Han escuchado declaraciones tanto de la parte estadounidense como de la nuestra de que esto podría llevar tiempo. Por lo tanto, inicialmente no se ha establecido un plazo preciso», ha añadido. «Lo clave no es el lugar ni el momento, sino cómo procederemos sustancialmente en las tareas acordadas y sobre las cuales se alcanzó un amplio entendimiento en Anchorage», dijo, refiriéndose a la reunión de Trump y Putin en Alaska.
Rusia, además, ha descartado este martes un alto el fuego en Ucrania y ha defendido que se deben solventar las causas originales del conflicto antes de sentarse para poner fin a la guerra, en alusión a las aspiraciones de Kiev de ingresar en la OTAN y la defensa de los derechos de los rusoparlantes.
«Lo importante, de todas formas, no es el lugar ni los plazos (de la próxima cumbre), sino cómo vamos a avanzar en lo que fue acordado y sobre lo que se alcanzó un amplio entendimiento en Alaska», ha dicho Lavrov en una rueda de prensa. El titular de Exteriores ruso también ha señalado, entre otras cosas, que un cese de las hostilidades supondría una «contradicción» con lo acordado en Alaska y ha acusado a los europeos de intentar convencer a la Casa Blanca de que cambie de postura.
La reunión iba a tratar sobre la guerra de Ucrania, pero la Casa Blanca dice ahora que «no hay planes para una reunión entre Trump y Putin en el futuro inmediato».
El presidente de EEUU, Donald Trump, ha suspendido la reunión que pensaba mantener en unas semanas con su homólogo ruso, Vladimir Putin, en la ciudad de Budapest.
Según informan medios estadounidenses y The Guardian, la Casa Blanca ha confirmado que ha suspendido los preparativos para la segunda cumbre entre Trump y Putin.
«No hay planes» de que el presidente de Estados Unidos se reúna con el presidente ruso «en el futuro inmediato», afirmó un funcionario.
Fue el propio Trump el que anunció el encuentro pactado en una llamada telefónica entre ambos mandatarios, horas antes de recibir al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, para tratar sobre los misiles Tomahawk.
Al final de la llamada, Trump y Putin pactaro el segundo encuentro este año en persona, tras el que mantuvieron el 15 de agosto en Alaska. «Nos reuniremos en un lugar acordado, Budapest, Hungría, para ver si podemos poner fin a esta ‘infame’ guerra entre Rusia y Ucrania», indicó.
Este martes se ha sabido que las conversaciones entre ambos gabinetes para planificar un posible encuentro quedaron «en suspenso». También que el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo sobre Budapest que «no se puede posponer algo que no se ha acordado».
«Han escuchado declaraciones tanto de la parte estadounidense como de la nuestra de que esto podría llevar tiempo. Por lo tanto, inicialmente no se estableció un plazo preciso», añadió. «Lo clave no es el lugar ni el momento, sino cómo procederemos sustancialmente en las tareas acordadas y sobre las cuales se alcanzó un amplio entendimiento en Anchorage», dijo, refiriéndose a la reunión de Trump y Putin en Alaska.
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