Rusia atacó anoche Kiev y una decena de regiones ucranianas en otro bombardeo masivo con misiles y drones que tuvo como principal objetivo infraestructuras energéticas de Ucrania. El ataque ha provocado en la capital ucraniana la muerte de seis personas, entre ellas un bebé de seis meses y una niña de 12 años, además de 17 heridos.
En la ciudad de Járkov, fue alcanzado por un dron el edificio en el que había situada una guardería, un ataque que dejó un muerto, siete heridos y obligó a evacuar de urgencia a los niños que estaban en el centro. En las redes sociales, se han difundido imágenes del momento de la evacuación de los niños:
«Todos los niños fueron evacuados y se encuentran en refugios. Los informes preliminares indican que muchos presentan reacciones de estrés agudo. No hay justificación para un ataque con drones contra un jardín de infancia, ni puede haberla jamás. Es evidente que Rusia se está volviendo más descarada. Estos ataques son una reprimenda rusa a todos los que insisten en una solución pacífica», ha denunciado el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.
Además de Kiev y Járkov, el ataque afectó a las regiones de Cherníguiv, Dnipró, Kirovogrado, Poltava, Cherkasi, Vínitsia, Sumi, Zaporiyia y Odesa. Rusia utilizó 405 drones de larga distancia y 28 misiles, de los que once eran misiles balísticos Iskander-M o su equivalente norcoreano KN-23 y otros cuatro misiles hipersónicos Kinzhal, que no pudieron ser interceptados por las defensas ucranianas, según detalla la Fuerza Aérea ucraniana.
El ataque masivo ruso alcanzó infraestructuras gasísticas situadas en Poltava, en el centro de Ucrania, según informó el jefe de la Administración Militar de la Región, Volodímir Kogut. En Odesa, el ataque alcanzó una infraestructura energética, dejando sin electricidad a miles de personas.
Zelenski volvió a pedir más presión a Rusia para que el Kremlin acceda a bajar las armas. «Lo que dice Rusia sobre la diplomacia no significa nada mientras los líderes rusos no sientan problemas críticos. Y esto solo puede conseguirse con sanciones, capacidades de largo alcance para Ucrania y diplomacia coordinada con todos nuestros socios», escribió Zelenski en su cuenta de X.
El presidente ucraniano pidió una vez más «sanciones contundentes» de EEUU y el G7 contra Rusia y apremió a la UE a aprobar cuanto antes su decimonoveno paquete de sanciones contra Moscú.
Ucrania reivindica un ataque con Storm Shadows
El Estado Mayor ucraniano ha reivindicado, por su parte, un ataque combinado llevado a cabo este martes, en el que se emplearon misiles británicos Storm Shadows, contra una planta química situada en la región rusa de Briansk, que produce pólvora, explosivos y combustible para algunos de los misiles con los que Rusia ataca Ucrania.
«La Planta Química de Briansk es una infraestructura clave del complejo militar-industrial del agresor», se lee en el comunicado publicado en X por el Estado Mayor. Reino Unido autorizó a finales del año pasado a Ucrania a utilizar los misiles Storm Shadow.
Entre las víctimas del ataque ruso contra Kiev hay un bebé de seis meses y una niña de 12 años.
Rusia atacó anoche Kiev y otras nueve regiones ucranianas en otro bombardeo masivo con misiles y drones que tuvo como principal objetivo infraestructuras energéticas de Ucrania. El ataque ha provocado la muerte de seis personas, entre ellas un bebé de seis meses y una niña de 12 años, además de 17 heridos.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha denunciado el ataque contra varias ciudades y ha asegurado «han sido golpeados muchos edificios residenciales». Además de Kiev, el ataque afectó a las regiones de Cherníguiv, Dnipró, Kirovogrado, Poltava, Cherkasi, Vínitsia, Sumi, Zaporiyia y Odesa.
Rusia alcanzó infraestructuras gasísticas situadas en Poltava, en el centro de Ucrania, según informó el jefe de la Administración Militar de la Región, Volodímir Kogut. En Odesa, el ataque alcanzó una infraestructura energética, dejando sin electricidad a miles de personas.
Zelenski volvió a pedir más presión a Rusia para que el Kremlin acceda a bajar las armas. «Lo que dice Rusia sobre la diplomacia no significa nada mientras los líderes rusos no sientan problemas críticos. Y esto solo puede conseguirse con sanciones, capacidades de largo alcance para Ucrania y diplomacia coordinada con todos nuestros socios», escribió Zelenski en su cuenta de X.
El presidente ucraniano pidió una vez más «sanciones contundentes» de EEUU y el G7 contra Rusia y apremió a la UE a aprobar cuanto antes su decimonoveno paquete de sanciones contra Moscú.
El Estado Mayor ucraniano ha reivindicado, por su parte, un ataque combinado llevado a cabo este martes, en el que se emplearon misiles británicos Storm Shadows, contra una planta química situada en la región rusa de Briansk, que produce pólvora, explosivos y combustible para algunos de los misiles con los que Rusia ataca Ucrania.
«La Planta Química de Briansk es una infraestructura clave del complejo militar-industrial del agresor», se lee en el comunicado publicado en X por el Estado Mayor. Reino Unido autorizó a finales del año pasado a Ucrania a utilizar los misiles Storm Shadow.
20MINUTOS.ES – Internacional